La visita de Stewart coincidió con el Año Nuevo, y además él y su familia celebraron la victoria del equipo de fútbol Celtic sobre los Rangers.
Sobre el maravilloso lugar expresó: “He tenido la suerte de alojarme en algunos de los mejores hoteles del mundo y el servicio en Gleneagles es insuperable”.
También, contó que la propina era un reconocimiento merecido: “El personal hace un excelente trabajo en una época del año muy agitada y merece cada centavo. Es la hospitalidad escocesa en su máxima expresión”.
Gleneagles fue inaugurado en 1924, es por ello que su estilo y su cuidado trasladan a sus huéspedes a 3 siglos atrás. Cuenta con habitaciones de lujo y suites con un costo aproximado de 2 mil dólares. El Hotel sirve un galardonado desayuno escocés completo a diario, y cuenta con 4 restaurantes.
Además, ocupa una superficie de unas 344 hectáreas y cuenta con 3 campos de golf profesionales, spa y escuela de cetrería. También se pueden realizar actividades de conducción por caminos sin pavimentar, equitación, adiestramiento canino y tiro.
